Las emociones van y vienen a lo largo del dÃa, con mayor o menor intensidad. Son una parte intrÃnseca de nuestra naturaleza. Nos ayudan a conectar con otras personas, fortalecer nuestros vÃnculos emocionales y a ser mejores comunicadores. Â
Gestionar nuestras emociones implica reconocer, comprender y regular nuestros propios sentimientos, asà como entender y responder a las emociones de los demás.Â
Son importantes porque nos permiten conocernos a nosotr@s mism@s y ser conscientes de nuestras necesidades;Â identificar los asuntos que no hemos podido resolver; y nos ayudan a comprender mejor las situaciones.Â
Es importante que no las etiquetemos, no son ni buenas ni malas. Hay emociones más placenteras que otras, pero  todas son necesarias. 
¡Nuestras emociones son la brújula para entender el mundo!
La alegrÃa nos ayuda a mejorar el estado de ánimo general, influye positivamente en el bienestar psicológico, las relaciones sociales, la función cognitiva, la salud fÃsica, la creatividad y la motivación. Además, nos brinda energÃa. Â
La tristeza es una emoción que puede ser dolorosa y desafiante, pero nos ayuda a conectar con las demás personas y crecer personalmente. Reconocer y aceptar la tristeza como parte natural de nuestra experiencia humana puede facilitar, la adaptación, la resiliencia y la reflexión.Â
El enojo puede ser una emoción difÃcil de gestionar, pero cuando la expresamos saludablemente, contribuye positivamente a nuestro bienestar personal y en la resolución de conflictos. Â
El enojo suele surgir cuando percibimos una amenaza o sentimos que algo es injusto. Actúa como un mecanismo de defensa que nos prepara para enfrentar o alejarnos de una amenaza o peligro. Â
El miedo cumple varias funciones esenciales en la vida humana, y su impacto puede ser tanto adaptativo como protector. Aunque puede ser una experiencia incómoda, el miedo tiene un papel adaptativo importante que nos ayuda a evitar peligros, promover la supervivencia y fomentar la preparación y el aprendizaje. Surge cuando sentimos una amenaza, por lo que nos ayuda a estar alerta y tomar precauciones. Â
La gestión de las emociones es una habilidad que se puede desarrollar, por eso te recomendamos:Â
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También recuerda ser empátic@ con las emociones de las demás personas.Â
Si la respuesta es no, no te preocupes porque es algo que nos puede pasar a tod@s. En algunas ocasiones nuestras obligaciones diarias y académicas nos hacen estar en modo automático y no somos conscientes de nuestras emociones o no las entendemos. Por ello es importante:Â
Observar la emoción:Â
Tomarnos un tiempo para observar nuestro estado mental. Sentarnos cómodos y en silencio, prestar atención a la respiración y observar cualquier sensación fÃsica y emocional que sintamos. Â
Registrar los pensamientos, emociones y conductas:Â
Una buena forma de identificar nuestras emociones es escribiendo en un papel sobre las situaciones que nos han provocado ciertas sensaciones o emociones. Escribir nos permite organizar y sistematizar la información; y de esta manera, identificar cómo nos sentimos con respecto a una situación en particular.Â
Podemos escribir sobre cuál fue la emoción, en qué momento del dÃa la sentimos, cuál fue su intensidad y duración, cuál fue el evento desencadenante, cuáles fueron los pensamientos que tuvimos en ese momento y las acciones que realizamos.Â
Compartir los sentimientos con personas cercanas:Â
Otra manera de identificarlas es poner las emociones en palabras. Conversar con personas de confianza nos puede ayudar a aclarar nuestras emociones y pensamientos.Â
Tod@s tenemos emociones, es importante no reprimirlas ni sentirnos avergonzad@s por ellas.Â
Tod@s debemos transitar por emociones que son difÃciles de gestionar, como por ejemplo la tristeza, la frustración y el enojo. Por eso es importante recordar: Â
Todas tus emociones son parte de tiÂ
No te juzgues por las emociones que sientes. Ellas forman parte de tu realidad y de tu vida. No las evites. Â
Tus emociones no te definen. Recuerda que son estados transitorios.Â
Acepta y comprende tus emocionesÂ
Reconoce cómo te sientes con respecto a algunas situaciones. Â
Acepta que las emociones pueden ser complejas y ambivalentes. Puedes experimentar múltiples emociones simultáneamente, y esto es parte de la vida. Aprende a aceptar la diversidad emocional.Â
Además, escucha qué te quieren decir. Es importante tener presente que las emociones nos pueden decir que debemos atender algo en nuestra vida.Â
Analiza la situaciónÂ
En ciertos momentos te encontrarás con situaciones en las cuales no podrás intervenir o no dependen de ti. Es importante que tengas presente esta limitación y te enfoques en lo que sà puedes hacer.Â
Expresa tus emocionesÂ
A veces, compartir lo que sentimos con otras personas nos ayuda a identificar nuestras emociones. Expresar nuestras ideas nos puede ayudar a entendernos mejor si estamos confusos.Â
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Practicar la atención plenaÂ
La atención plena te conecta con el momento presente. PractÃcala para observar y aceptar tus emociones sin juzgar. Esto facilita una comprensión más profunda de lo que estás experimentando.Â
En caso de que requieras apoyo para gestionar tus emociones, recuerda que puedes acudir al CASE que corresponda.Â